Hace tiempo que quiero grabar un video de mis conferencias para poder colgarlo en mi página web. Dicho, hecho, la semana pasada me reuní con una persona, llamémoslo David, y que ha sido el impulso para escribir este artículo, sobre la primera impresión. El caso es que me dio su mano de forma tan destensada que pensaba que tenía un pez muerto en la mano, la primera impresión fue pésima y la verdad es que me pregunté cómo es posible que haya personas que no saben de la importancia de la primera impresión o al menos no les parece importar. De forma que decidí escribir este artículo.
La primera impresión y la ciencia
Treinta milisegundos de exposición. Esto es el tiempo que necesitamos ver la cara de una persona para que nuestro cerebro tenga suficiente información para tener una idea de la otra persona. Así lo indica Face Value, el libro de Alexander Todorov, psicólogo de Princeton.
Las primeras impresiones son cruciales, en el mundo de los negocios, pero desde luego no menos en la vida personal, y como visto arriba se hacen más rápido de lo que podemos imaginarnos. Y ampliando el tiempo de observación de la otra persona, en menos de siete segundos juzgamos las personas con las que nos encontramos la primera vez por su confiabilidad, competencia, calidez y confianza. Siete segundos para poner la persona en un cajón. Y una vez etiquetados y guardados en un cajón como simpático o desagradable, de confianza o sospechoso observamos la otra persona a través de este filtro.
Esto es el trabajo del Posterior Cingular Cortex (PCC) y la amígdala que controla y modera nuestras motivaciones, diciéndonos a dónde ir y por qué, navegando por nuestro mundo social. Entre los dos nos ayudan a calcular las primeras impresiones de los demás. "Estas regiones clasifican la información sobre la base de su importancia personal y subjetiva y la resumen en una puntuación, una primera impresión", dice Daniela Schiller de la Universidad de Nueva York. Dicho de otra manera y simplificándolo mucho: conocer personas activa la misma región del cerebro responsable de asignar precios a objetos.
Después de haber asignado un valor a una persona, tomamos la decisión sobre cómo actuar con dicha persona: ¿queremos acercarnos más? Al saber cuál es el valor de esta persona para nosotros, ¿queremos que esta persona entre en nuestra red social?
Mientras no podemos parar nuestro interlocutor de tomar estas decisiones rápidas, porque es la forma en la que nuestro cerebro funciona hace miles de años, podemos entender qué hacer para que la evaluación sobre nosotros sea favorable. Las primeras impresiones están fuertemente influenciadas por señales no verbales. De hecho, los estudios han encontrado que el lenguaje corporal tiene más de cuatro veces el impacto en la primera impresión que cualquier cosa que decimos. Afortunadamente, podemos trabajar activamente en las señales que emitimos.
6 claves para hacer una primera impresión positiva
Las personas leen tu actitud al instante, de forma que antes de ir a una sala de reuniones, o entrar en la oficina de alguien, sea para una venta o una entrevista de trabajo, visualiza la situación y decídete de forma consciente sobre qué actitud deseas representar. El tipo de actitud que atrae a personas incluye amistoso, feliz, receptivo, paciente, accesible o curioso. Las actitudes repelentes incluyen enojado, impaciente, aburrido, arrogante, miedoso o deprimido.
Ahora al leer estas líneas, acompáñame en el movimiento: levantar los hombros hacia tus orejas, ahora rodarlos hacia atrás y dejarlos caer, perfecto. Mantener esta postura erguida, los hombros en esta posición y la cabeza en alto hace que parecemos seguros de nosotros mismos.
Una sonrisa es la expresión facial que más nos gusta. Es una invitación de bienvenida, dice que soy amigable y accesible. El consejo es llevar esta pequeña sonrisa al entrar en la habitación y en el caso óptimo dejar que se ensanche al ver la otra persona. Si te cuesta, piensa antes de entrar en algo agradable que te ha sucedido o en una persona que quieres. Ya verás cómo eres capaz de dibujar una sonrisa en tu rostro.
Es importante establecer contacto visual. Mirar a los ojos de la otra persona transmite energía e indica apertura. Por cierto, es una herramienta que la mayoría de las personas usa menos de lo que se puede o debe para optimizar la primera impresión. Un truco para extender la mirada directa a los ojos es averiguar con cada persona el color de los ojos de la otra persona. Esto te ayudará de forma consciente extender la mirada un poco más de lo habitual. ¡No lo temas!
En el contexto de la mirada también es positivo levantar las cejas. Lo que sucede en este caso es que abrimos los ojos brevemente un poco más de lo normal y simula una señal universal de reconocimiento amistoso.
Inclinarse hacia alguien muestra que está comprometido e interesado en la otra persona y lo que dice. No obstante es importante respetar el espacio personal de la otra persona lo que no siempre resulta tan fácil y claro sobre todo al estar en contacto con personas de otras culturas. La distancia profesional correcta para un español es sensiblemente inferior a la de un japonés. La ciencia que trabaja las distancias se llama Proxémica.
El sexto consejo viene más tarde en la interacción, pero es muy valioso para crear un impacto duradero y positivo al usar una sola palabra: el nombre de la otra persona. Cuando encuentras a alguien y te dicen su nombre, encuentra una manera de repetirlo durante la conversación y tocas a la persona ligeramente en el brazo en el mismo instante. Este breve toque junto con el nombre desencadena sentimientos y emociones positivas en la otra persona que se anclan al contacto que has hecho con el brazo. Luego, en futuras reuniones, puedes reactivar esa buena sensación una vez más tocando ligeramente su brazo. Si te es difícil recordar nombres, aquí encuentras algunos consejos como mejorar.
La primera impresión en el puesto de trabajo
Otra primera impresión la hacen las empresas con un nuevo empleado. Aquí tenemos más de siete segundos porque todo son nuevas impresiones y todo suma. O resta. Pero una cosa que no me puedo reprimir incluir aquí en el artículo es la mesa de trabajo de una persona nueva. Cuantas empresas existen que ni siquiera tienen el escritorio listo para la nueva persona el día que comienza. La persona se encuentra sin acceso a las carpetas de trabajo, el email no funciona, no tiene papel ni bolígrafos… es una lucha desde el momento uno.
Con lo fácil que es prepararlo todo con antelación para dejar una primera impresión buena para la persona nueva, hacer que se sienta apreciada y que es importante para la empresa. ¡Qué diferencia en la primera impresión! Y lo que es igual aquí es la nueva persona etiqueta la empresa y va a mirar todo lo que sucede a través de este filtro creado el primer día. Una lástima despreciar la oportunidad de crear un filtro de gafas color rosa…
Abajo la foto que una persona publicó en LinkedIn su primer día de trabajo. Imagínate que filtro más bonito ha creado la empresa ese primer día, y además con poco esfuerzo.
¿Que escoges, gafas gris o gafas rosa?
Volviendo al David, que encontré para grabar el video de una de mis conferencias, el caso es que no le di el trabajo. Debido a la primera impresión que obtuve al saludar esta mano, el pez muerto, no pude distinto que ver todas sus palabras a través del filtro creado.
Lo que quiero recalcar es que lo tienes en la mano (nunca mejor dicho en el caso del David…), como empresario, manager y/o persona de mejorar la primera impresión que otras personas tienen de ti o de tu empresa con un efecto enorme en todo lo que sucede después. Imagínate la diferencia que otras personas te ven todos con unas gafas de color gris o unas de color rosa. Te cambiará la vida, literalmente.
Próximos pasos...
- De 0 a 100… ¿Cuantos puntos tiene tu empresa? Mide la solidez de tu empresa: EOS Organizational Checkup
- Descargarte libros de forma gratuita o ver unos videos sobre EOS
- Solicita una reunión gratuita de 90 minutos con un Implementador de EOS para obtener una imagen clara de cómo es gestionar tu empresa con EOS.