Los datos demuestran que no es nada fácil ser un buen CEO: entre los años 2000 y 2013 un 25% de los CEO de las empresas Fortune 500 (las 500 empresas más importantes del planeta) perdieron su puesto de forma involuntaria: fueron despedidos. El coste y perjuicio que esto conlleva es inmenso. PwC calculó una pérdida de unos 112 mil millones de dólares debido a la falta de continuidad. Razón suficiente para preguntarse qué es lo que diferencia los CEO de éxito de los menos exitosos.
Qué es un CEO y cuáles son sus responsabilidades
El título CEO significa Chief Executive Officer y es el trabajador activo de máxima responsabilidad. Encima del CEO solo están los propietarios de la empresa. En las empresas más pequeñas el CEO muy frecuentemente es al mismo tiempo el fundador y accionista mayoritario (o único) de la empresa. Otros nombres que recibe el CEO son Director General, Gerente o simplemente Director.
Antes de saber qué hacen diferente los CEO de éxito es crucial entender cuáles son sus máximas responsabilidades. Si no sabemos que esperar de una persona es difícil saber cómo ha de ser… Pero por suerte hay multitud de libros y artículos que hablan de ello y que en líneas generales están de acuerdo en que sean las 5 siguientes responsabilidades:
- Cultura empresarial
De forma simplificada la cultura empresarial abarca los valores existentes en las personas de la compañía y se expresa en la comunicación. - Dirección estratégica
Es el CEO de la compañía que define (en el mejor de los casos en conjunto con su equipo directivo) cual es la línea estratégica de la empresa. Qué hacer y qué dejar de hacer. “Una estratégica bien definida significa que todo el mundo sabe cuándo decir no ante nuevas oportunidades.” - Equipo directivo
Sin personas no hay empresa. Pero tienen que ser las personas adecuadas en el puesto adecuado. Empezando por el equipo directivo. Porque tal como va el equipo directivo así irá el resto de la compañía.
- Obstáculos
A veces es preciso eliminar barreras, tomar una decisión, decidir por donde seguir. Si la empresa se estanca en última instancia es el CEO quien debe eliminar estos obstáculos para que la empresa pueda seguir hacia sus objetivos por los carriles de su estrategia.
- Resultados
Last but not least, el CEO es el máximo responsable para conseguir los resultados planificados y esperados para la empresa. En este contexto suele ser el representante de las personas executivas ante los propietarios de la empresa.
Como se ve fácilmente el éxito de la empresa depende mucho del CEO ya que muchos caminos y decisiones acaban en el CEO o se deben iniciar por él.
CEO, fundador, propietario
La mayoría de las empresas con las que trabajo como Implementador profesional de EOS tienen equipos de entre 10 y 250 empleados y el fundador de la empresa ejerce la función del CEO. Esto no siempre lleva a los mejores resultados o a los resultados deseados por la diferencia de los perfiles necesaria entre lo que es un fundador y un CEO o un propietario. Mientras el fundador suele ser una persona visionaria y con mucha energía para lanzar su nueva idea o proyecto al mundo, el CEO gestiona una empresa que ya ha crecido y necesita maximizar la rentabilidad o el crecimiento. El propietario de una empresa en cambio exclusivamente debe velar por maximizar el capital que tiene invertido en una empresa, una labor ya casi financiera.
Resumiendo, ser fundador, propietario o CEO son tres roles con responsabilidades completamente distintas por lo que es normal que requieren personalidades y capacidades distintas.
El siguiente grafico de la HBR (Harvard Business Review) revela que la constelación en la que el fundador, el CEO y el propietario recae en la misma persona es la peor que hay en cuanto a la gestión de las empresas. Peor incluso que las instituciones públicas de las que tanto nos quejamos todos…
Que define un buen CEO
Volviendo a la pregunta qué es lo que hacen los grandes CEO diferente. Esta misma pregunta se han hecho Elena Botelho y Kim Powell de ghSMART y se embarcaron en un proyecto de análisis de 10 años para saber cuáles son realmente las características, maneras y capacidades de un buen CEO.
El resultado diverge mucho de lo que la mayoría piensa al ser preguntado o de lo que representan las ofertas de trabajo para cubrir puestos de CEO. El dibujo actual favorito para un CEO es un hombre carismático de más de 1,80 metros, graduado en una de las mejores universidades, con MBA o similar, con claridad sobre visión y estratégica y la capacidad de tomar decisiones perfectas en momentos de estrés. En cambio los datos demuestran que en Estados Unidos, de los 6 millones de CEO de compañías, solo el 7% proviene de una escuela de élite y el 8% ni siquiera tiene título universitario. Algunos son inmigrantes y muchos se abrieron camino desde lo más bajo de las compañías.
En su análisis a lo largo de 10 años y mediante una base de datos de miles de empresas Botelho y Powell encontraron que hay 4 rasgos que sobresalen con diferencia en los CEO de éxito. Si un CEO los tiene aumenta con creces la probabilidad de tener éxito con la empresa. Son los 4 rasgos que destacan de los 30 que suelen analizar los Headhunters al reclutar un CEO.
Los 4 rasgos son muy simples y casi decepcionan al verlos. Pero la clave está en crear foco alrededor de ellos y ejecutar sobre ellos con absoluta consistencia:
Decidir con velocidad y convicción
¡Decidir rápido y siempre acertar! Así cualquiera. La realidad no es siempre así de fácil, pero lo cierto es que un CEO decisivo sube la probabilidad de que la empresa liderada por él tenga éxito. Tomar las decisiones antes, más rápido y con más convicción. Este tipo de CEO es 12 veces más probable de tener éxito que el CEO que duda, tarda y no se decide. El CEO se convierte en el cuello de botella para la empresa. En la investigación de ghSMART la gran mayoría (el 94%) sale peor parado por decidir lento, tarde y con poca convicción.
Los CEO de éxito entienden que una decisión errónea a menudo es mejor que no tomar ninguna decisión. Citan en los estudios el ejemplo de Jerry Bowe, CEO de Vi-Jon: “cuando tengo el 65% de la información acerca de un tema he de tomar la decisión.”
Para poder tomar decisiones hazte dos preguntas:
- ¿Qué coste puede tener una decisión errónea teniendo en cuenta la probabilidad de tomarla mal?
- ¿Qué coste tiene para la organización que no te decidas?
Y una vez que la decisión está tomada, no dudes, no desprendas dudas. Decídete y lánzate con toda la energía. El precio de no hacerlo y transmitir dudas es la pérdida de credibilidad y a menudo los mejores del equipo serán los primeros en abandonar el barco de un CEO que no se decide, decide lento o con poca convicción.
Conseguir el compromiso de tu gente
Para conseguir que las cosas avancen en la dirección deseada el CEO no lo puede hacer solo, necesita su gente. No por ende se dice “la empresa son las personas”. Sin el compromiso del equipo directivo ninguna decisión, por rápido tomada y buena que sea, no sirve de nada. Por lo que es fundamental que el CEO sepa cuáles son las personas clave y asegurarse de que estén comprometidos con la decisión.
Lo que ayuda en caso de dudas e importantes decisiones es crear un mapa de las personas clave, saber y entender la opinión de los detractores del plan y trabajar con ellos de forma activa para identificar como ha de cambiar el plan para que se sumen a la decisión.
De lo contrario de lo que algunas personas puedan creer, conseguir el compromiso de tu equipo no significa que les caigas bien o protegerles ante decisiones duras. Al contrario, este tipo de CEO indican desde ghSMART a menudo representan menos probabilidad de éxito. Crear el compromiso significa crear la confianza que el CEO lleve la empresa (y con ello las personas) al éxito a pesar de decisiones difíciles que habrá que tomar por el camino.
Líderes que tienen esta característica escuchan a todos pero no necesariamente dan voz ni mucho menos veto a todos. Encontrar consensos es lento y a menudo lleva solo al denominador más bajo. Una formula con la que la empresa no suele ganar. La clave está en encontrar el punto entremedio entre escuchar, crear compromiso pero tomar la decisión de forma rápida y decidida.
Adaptación a lo imprevisible
Como ya mencionado arriba, una de las máximas responsabilidades del CEO es tomar decisiones en situaciones clave y evitar estancamiento. Si las cosas son fáciles la decisión ya la tomarán los demás de tu equipo. Esto sumado a una economía cada vez más rápida en el mundo V.U.C.A. y con cambios imprevisibles, las empresas necesitan CEO capaces de adaptarse de forma rápida a situaciones nuevas y desconocidas y aun así funcionar con la misma capacidad arriba escrita. Según los estudios, CEO que tienen esta capacidad son 6,7 veces más probables de tener éxito con sus empresas.
Para que esto funcione muchos de los CEO de éxito dedican mucho tiempo a los retos a largo plazo (versus medio y corto plazo). Los de más éxito de entre el 30% y 50% de su tiempo. ¿Cuánto tiempo dedicas tú al futuro de tu empresa de aquí cinco, diez o veinte años?
Conseguir resultados de forma consistente
Sin sorpresa pero quizás de recordatorio el factor de más relevancia es conseguir resultados de forma consistente. De lo contrario de lo que se puede pensar no es tanto el tamaño de los resultados, sino la consistencia. Es decir, conseguir lo predicado de forma consistente. Conseguir las propias predicciones y compromisos. Crearás credibilidad y confianza, la base para construir un buen equipo directivo según Patrick Lencioni.
Una práctica clave en esto es definir metas alcanzables y conseguirlas de forma consistente. En el caso de EOS (Entrepreneurial Operating System) definimos prioridades trimestrales (que llamamos Rocas) y que han de ser S.M.A.R.T. Después hay todo un trimestre para alcanzarlas. De esta forma la empresa y el CEO tienen la posibilidad de definir y alcanzar las metas cada trimestre.
ghSMART indica que los CEO de éxito usan diferentes tácticas en esta disciplina: establecer una metodología de gestión de empresas, definir un ritmo de reuniones que soporta la ejecución del plan de business, tener Cuadros de Mando, así como las responsabilidades claramente definidas en toda la empresa. Y finalmente y muy importante, rodearse de las personas adecuadas en el equipo directivo.
Desafortunadamente el 60% de los CEO menos efectivos tardan demasiado en componer su equipo directivo. O apuestan por el confort personal, simpatía y lealtad en vez de poner el foco en el rendimiento y los valores. Una base de toma de decisión que a menudo no lleva a los resultados esperados.
Como mejorar como CEO
De forma que ya lo sabes, esto son las cuatro características de los CEO que sobresalen:
- Decidir con velocidad y convicción
- Conseguir el compromiso de tu gente
- Adaptación a lo imprevisible
- Conseguir resultados de forma consistente
Para que no se quede en la teoría sino tengas opciones sobre qué hacer para acercarte más al CEO ideal aquí te dejo cuatro recomendaciones cómo conseguirlo:
- Te invito a mirarte en el espejo, ser crítico contigo mismo, y preguntarte del 100% del tiempo en que porcentaje muestras estos cuatro rasgos. En alemán decimos: “El autoconocimiento es el primer paso hacia la mejora.” Tendrás una respuesta donde mejorar. Nadie es perfecto, pero la meta es mejorar.
- Si lo quieres saber con más datos y exactitud puedes responder este pequeño cuestionario (solo en inglés) online de 16 preguntas: ir al cuestionario.
- Para mejorar se necesita metodología y disciplina. EOS es un sistema pensado para mejorar la gestión de empresas de entre 10 y 250 empleados y ayuda a mejorar en estos cuatro características a través de la metodología
- Y por último lo quiero exponer como opción: quizás eres un fundador, CEO y propietario pero notas y sabes que frenas la empresa en su desarrollo porque no tienes lo que se necesita para hacer crecer la empresa más. Quizás es hora de dar un paso hacia atrás y ceder la gestión a un CEO que sí tiene todas las características.
Próximos pasos...
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- Descargarte libros de forma gratuita o ver unos videos sobre EOS
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